Escribe tus ideas
Nunca sabemos cuándo nos puede llegar un momento de inspiración. De camino al trabajo, en algún restaurant o café, etc. Quizás viste un plato que se te ocurre recrear con nuevos ingredientes o variaciones o viste algo que te inspiró a decorar de manera diferente algo que ya habías hecho ¡No olvides apuntar todo! Así cuando las ideas no vengan a ti, puedes recurrir a esa lista de ideas.
¡No te obligues!
En aquellos momentos en que no estés inspirado, lo peor es presionarse más, pues sólo generarás tensión y bloqueo.
Crea un espacio inspirador
Te aconsejamos destinar un espacio donde te sientas a gusto para poder desarrollar nuevas ideas. Decora ese lugar con tu estilo y con elementos que te llamen la atención. Puede ser la cocina o una habitación. Lo importante es que te sientas libre y cómodo.
¡No temas al fracaso!
Lo más importante es disfrutar el proceso, recuerda que parte importante del aprendizaje es el error. Así que si un plato no resultó como te gusta, inténtalo nuevamente, sin culpas.