Para mantener tu ropa impecable, es necesario tener la lavadora totalmente limpia, lo cual además prolongará su vida útil. Para limpiarla, pon en un tazón agua, sal, vinagre y bicarbonato de sodio. Luego, con una esponja frota todas las superficies internas y el tambor para retirar la suciedad, gérmenes y bacterias que pueden llegar a crear moho. Por último, enciende la lavadora y déjala que funcione sin jabón ni cloro.