Para evitar la contaminación, puedes guardar las pilas dentro de una botella de plástico con aserrín seco, que cumplirá la labor de colchón absorbente. A continuación, te dejamos algunas recomendaciones para que lo hagas en tu hogar:
Cuida que las pilas y el aserrín no sobrepasen la capacidad de la botella.
Una manera más simple es llenar la botella con agua y enterrarla en tu jardín. El agua absorberá el ácido de las pilas y así éstas no contaminarán.
Si no tienes dónde enterrar la botella, puedes usar aplicaciones o buscar en internet sitios en donde puedes reciclarlas. Hay lugares en los que, incluso, van a buscar estos desechos hasta tu hogar.
Otras cosas que puedes hacer para evitar la contaminación de estos desechos.
Elige las pilas recargables porque, aunque contienen elementos contaminantes, la reutilización (hasta mil veces), evita que existan más pilas desechadas.
Compra pilas en tiendas establecidas y no en el comercio ambulante.
Incentiva la correcta manipulación de estos desechos entre tus cercanos.